¿Cómo reaccionar ante un bajo rendimiento académico? Consulte aquí algunos tips para apoyar a un hijo con malas calificaciones presentes en la boleta.
"¿Otra vez reprobaste?" es una de las exclamaciones y preguntas que muchos padres de familia se hacen cuando un hijo llega con una boleta de calificaciones con resultados insatisfactorios. Las malas calificaciones no son problemas de unos cuantos, sino un escenario que viven muchas familias. Sin embargo, no todos lo abordan del mismo modo.
No es fácil lidiar con esta situación, pero es fundamental saber cómo tratarlo para motivar a nuestro hijo para que mejore su rendimiento académico y obtenga distintos resultados. A continuación le damos algunos consejos que debe tomar en cuenta al hablar con su hijo sobre este tema:
1. Evalue la situación académica en la que se encuentra
Antes de actuar, es necesario conocer cuál es el problema al que se enfrentan. Es distinto delimitar un plan de acción cuando se trata de una caída inusual en las calificaciones de un estudiante regular a tomar acciones cuando se trata de algo repetitivo en un joven y que trata de obtener una calificación aprobatoria para poder cursar el siguiente cuatrimestre. Dependiendo de la situación, son las medidas a tomar.
2. Dialoguen sobre los posibles causantes de este bajo rendimiento
Sin duda, esta es una tarea de las más difíciles, tanto para el padre como para el hijo, ya que aquí es posible que ambos tengan una postura diferente. Como padre es difícil no dejarse llevar por un aspecto emocional y mostrar enojo o decepción al ver que nuestro hijo no obtiene los resultados deseados y querramos mantener un grado de exigencia mayor. Mientras que el estudiante puede mantener una postura de aparente indiferencia o incluso de temor por las consecuencias a enfrentar. Sin embargo es necesario dejar esto a un lado para buscar una posible solución.
Un bajo rendimiento académico no necesariamente es algo deseado por el estudiante, sino que puede estar ocasionado por diversos factores.
Existen varios elementos que pueden hacer mella en el desempeño escolar de un estudiante, como lo son:
Este paso es vital para saber cómo actuar y el plan de acción que efectuarán para lograr una mejora académica.
3. Acuerden un plan de mejora que involucre a padre y a hijo
Un bajo rendimiento escolar difícilmente mejorará con un simple 'jalón de orejas', sino que es necesario acordar un plan de mejora para cambiar la situación. Es vital en este paso, darle el acompañamiento y apoyo que nuestro hijo necesita, quizá sea ayuda para esclarecer dudas, apoyo de un tutor que le pueda brindar asesorías extra clase, realizar ejercicios extras en casa o en caso de tratarse de un aspecto emocional, analizar la posibilidad de asistir con un terapeuta. Aquellos acuerdos pactados es necesario comprometerse con su cumplimiento y así en mayor grado de apego tengamos, es probable que obtengamos mejores resultados.
4. Realice un monitoreo periódico de su rendimiento escolar
Sí, un estudiante adolescente también puede requerir de monitoreo frecuente y con esto no se trata de una revisión exhaustiva de apuntes y tareas como si se tratara de un preescolar, sino llevar un seguimiento de las asignaturas que nuestros hijos se encuentran estudiando, preguntarle sobre lo que está viendo en clase, su materia favorita, cómo le fue con cierto profesor o qué resultados obtuvo en el examen. Este seguimiento debe hacerse con cautela, de modo que no resulte asfixiante para el adolescente.
Es necesario hacerle saber que se tiene confianza en lo que hace, que él es responsable de sus calificaciones, sin embargo nosotros, como padres nos encontramos interesados en sus actividades y estamos a su lado para sostenerlos de la mano y ayudarlos cuando requieran de un apoyo extra.
5. Proporciónele la motivación necesaria para que dé lo mejor de sí.
Lo que los expertos en el tema coinciden es que, sin lugar a dudas, mantener un acercamiento constructivo y de manera positiva sobre las calificaciones de nuestros hijos hará la diferencia para ayudarlos a salir adelante.
Creer en sus capacidades y brindarles la confianza que requieren puede aportar mucho más que si nos enfocamos en las valoraciones negativas.
"Es que no aprendes", "No sé a qué vas a la escuela, eres un tonto", más allá de dañar el autoestima de un joven, pueden cerrarnos las puertas a un verdadero diálogo con nuestros hijos, ocultando la realidad de lo que en verdad sucede respecto a su desempeño académico.
Siempre podemos acercarnos a un profesional
No necesariamente un caso se puede resolver a la primera. Y como padres, jamás estaremos solos. Es posible acercarse con un experto en el tema para pedirle asesoría sobre cómo manejar este tema de la mejor manera. Ningún problema es demasiado grande y nunca es demasiado tarde para resolverlo y mucho menos cuando involucra a nuestros hijos.
En Prepa UNITEC, los estudiantes reciben el apoyo que requieren ante una situación de bajo rendimiento académico en el Centro de Apoyo y Desarrollo Estudiantil (CADE). Conozca más acerca de nuestro modelo de prepa universitaria.