Dos exalumnas de la UNITEC nos hablan de su experiencia de ser mujeres emprendedoras y los retos a los que se enfrentaron.

Karina Peralta y Yessica L. Coyotzi

En la actualidad, las mujeres tienen una baja representación en las actividades económicas y en la administración pública alrededor del mundo: apenas un 21% de los escaños parlamentarios los ocupan mujeres, lejos de la meta del 30%.

Además, ONU Mujeres señala en un reciente estudio que países con mayor igualdad de género tienen economías más competitivas y crecen más rápido.

Pero México tiene temas pendientes. Menos del 4% de los puestos de alta dirección son ocupados por mujeres y, según la aceleradora Victoria 147, solo un 19% es líder en un proyecto de emprendimiento.

Pero dos exalumnas de la UNITEC que tomaron el camino del emprendimiento nos comparten su propia perspectiva sobre el papel que tienen las mujeres en la creación de empresas.

Mujeres comprometidas

Yessica L. Coyotzi es dueña de su propia casa de Té. Su proyecto se llama Té de Querer y ofrece toda una experiencia alrededor de esta tradicional bebida.

La idea llegó debido a que Yessica no toma café. “Mi abuelita me enseño muchas infusiones para aliviarme porque siempre tenía algo”, recuerda.

“Como me aburria –agrega Yessica–, empecé a buscar nuevos sabores de té y en esa búsqueda llegué a la Escuela Argentina del Té, en la provincia de Santa Fe. Cursé la carrera de Sommelier de té y regresé a México”.

Sabía que entre la cultura de las bebidas calientes el café era rey, por lo que apostó por la presentación del té en en malteada, esquimo o frappe. Así, asegura la emprendedora, quiso romper con la idea de que el té caliente es sinónimo de estar enfermo.

“También empecé con cocteles, como el mojito con té, con sabor casi idéntico pero con menos calorías. Y ahora también preparo destilados, como vodka sabor frutos rojos, vino tinto sabor chai y ron al lemmon grass”.

Pero el camino no fue sencillo. Ella tuvo que vivir de primera mano algunas de las trabas a las que se enfrentan las mujeres.

“Como madre soltera muchos tienen prejuicios sobre ti. Y también están los que no creían que yo fuera la directora del proyecto; por ser mujer pensaban que era la secretaria. Luego estaban los hombres con malas intenciones que querían obtener algo a cambio de hacer negocio”, explica Yessica.

Pero su determianción fue más fuerte. Demostró a los escépticos que su idea tenía mercado en México y que, aunque fue educada con la mentalidad de ser empleada y no emprendedora, sacó adelante su proyecto.

Comenzó con todo en contra y dos mil pesos en la bolsa. Hoy, luego ya de casi dos años, tiene una pintoresca cada de té en la colonia Juárez y que ella planea dejar como patrimonio para su hija.

Educar para progresar

Entre los temas pendientes en la agenda de la equidad, la educación es un foco rojo.

Karina Peralta, egresada de la Licenciatura en Mercadotecnia de Campus Sur, es fundadora del proyecto Tunnel Vision, y con el que obtuvo el Premio UNITEC 2015.

Este emprendimiento social crea diferentes herramientas para los salones de educación básica, como equipos de computación con proyector integrado o la instalación de toda un aula en la que los niños reciben una educación multidisciplinaria y multimedia.

Su meta es que los pequeños desde que comienzan a estudiar sepan todo su potencial y sus intereses.

“Ser emprendedora es difícil, pero no imposible. Desde la inversión inicial hasta todo el desgaste mental por el que pasas por el estrés, son factores que se van superando. Con paciencia y disponibilidad es cuando descubres tus verdaderas oportunidades”, asegura Karina Peralta.

El interés por la educación viene de familia. Su padre se dedicó también a desarrollar proyectores que se comercializaron en escuelas de toda la república y hasta en América Latina.

Ella decidió seguir el mismo camino, aunque no estuvo exento de ‘baches’.

Karina dice que “es cierto que como mujer tienes más retos, pero también tenemos otras ventajas. Tenemos la habilidad del multitasking, por ejemplo. Hay que disfrutar el ser mujeres y demostrar que podemos llevar a cabo proyectos muy padres, de impacto social y que abrimos brecha tanto a mujeres como hombres, a demostrarle a todos los que quieren arrancar un proyecto que pueden llevarlos a cabo”.

La fundadora de Tunnel Vision comparte además algunos consejos para todas las mujeres de la comunidad UNITEC para atreverse a emprender:

  1. No dejes que tus ideas sean pensamientos fugaces. Anótalas y tenlas presentes.
  2. Toda idea se puede capitalizar, es cuestión de encontrar los medios adecuados, el entorno exacto y la gente precisa. Hay que involucrarse mucho para lograr tener éxito.
  3. Emprender es ver la realidad de otra manera. Una vez que te atreves, descubres que es un mundo maravilloso. No hay como ser de utilidad a la sociedad.

“Hay mucho potencial en este país, mucha creatividad y ganas de hacer cosas diferentes. Esa fuerza de querer cambiar nos inspira a todos”, concluye Karina.

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