Blog de educación | UNITEC Universidad Tecnológica de México

Meditar para estudiar mejor: ¿te animarías a seguir el reto?

Escrito por Paulina Santibáñez | May 20, 2022 5:00:00 AM

Meditar, aunque sea sólo durante cinco minutos al día, mejorará visiblemente tu estado de ánimo, te dará más energía y te ayudará a concentrarte mejor. 

¿Te ha pasado que, por más que intentas, simplemente no puedes concentrarte para estudiar? ¿Que estás en clase, pero tu mente está en otro lado? ¿O quizá te sientes tan estresado en época de entregas y exámenes que sientes que no rindes como deberías?

Muchas veces, nuestra mente está en tantas cosas al mismo tiempo –amigos, asuntos familiares, exámenes, tareas, el Whatsapp- que en realidad no está en ninguna parte. Nos sentimos dispersos y nos cuesta trabajo concentrarnos, estamos presentes físicamente en una clase o una conversación con nuestros padres o amigos, pero nuestra mente está en otro lado.

La realidad es que tener problemas para concentrarse en los estudios es algo muy común. Sin embargo, esto no quiere decir que sea una situación irremediable.

¿Qué podrías hacer para sentirte más tranquilo, con mucha mayor claridad y capacidad para concentrarte? ¿De qué forma podrías aprovechar al máximo tu tiempo y tus habilidades para destacar en la escuela?

Los beneficios de meditar

¿Has escuchado hablar sobre la meditación? Quizá sí, y lo que imagines sea una persona con barba larga, un turbante y piernas cruzadas, flotando por encima del piso. En realidad, cualquier persona (y no solo los maestros iluminados) puede meditar y sentir inmediatamente los beneficios de esta práctica.

Varios estudios científicos han demostrado que meditar, aunque sea sólo durante cinco minutos al día, mejora visiblemente el estado de ánimo, la capacidad de concentrarse y los niveles de energía. La clave está, como todo, en la constancia.

Relacionado: ¿Por qué hacer una cosa a la vez podría cambiarte la vida?

Meditar brinda muchos beneficios a nivel físico como emocional. Entre otros, mejora los niveles de atención, reduce el estrés y la ansiedad, ayuda a mejorar nuestra relación con otras personas, a manejar nuestras emociones y reacciones, conocernos mejor… ¡Los beneficios son muchísimos!

Cómo meditar

Busca un espacio cómodo y silencioso, donde difícilmente vayas a ser interrumpido. Si hay alguien más en casa, avisa que meditarás para que no te molesten. Deja el celular lejos (muy lejos) y siéntate encima de un cojín, con las piernas cruzadas y la espalda recta. Puedes poner música que te relaje o bien estar en silencio.

Cierra los ojos y comienza por concentrarte en tu respiración. Por tu cabeza pasarán mil pensamientos y la tentación por distraerte será fuerte, pero no cedas. Déjalos pasar y sigue centrándote en tu respiración. Imagina cómo, al inhalar, el aire entra de un color a tu pecho y, al exhalar, sale de un tono más claro. Imagina que así “limpias” todo lo que traes dentro y que te impide concentrarte y ver las cosas con claridad. Repite este ejercicio hasta que imagines que tu exhalación sale limpia, de un color prácticamente transparente.

Te invitamos a que realices el siguiente reto: medita todos los días, en la mañana o en la noche antes de irte a acostar, durante cinco minutos durante 20 días seguidos. No lo dejes de hacer ni un solo día, y si dejas de hacerlo, comienza a contar desde cero. Cuando pase este tiempo, evalúa cómo te has sentido y si has notado cambios tanto en tus estudios como en tu vida diaria. Si te sientes bien, ¡no dejes de hacerlo y vuélvelo parte de tu rutina diaria!