Empleo
En el mundo laboral, uno de los documentos más relevantes que posee un candidato es el currículum vitae (CV). A la hora de redactarlo, surgen preguntas como "¿Qué se pone en aptitudes y habilidades en un currículum?" y "¿Cuáles son algunos ejemplos de habilidades y aptitudes?" Conocer estos términos y sus diferencias puede ser la clave para destacarte entre la multitud de aspirantes.
Hablar de aptitudes y habilidades puede parecer redundante, pues ambas suelen usarse indistintamente. Sin embargo, existe una diferencia sutil y vital que las distingue. En este artículo, profundizaremos en el significado de cada uno de estos conceptos y brindaremos ejemplos de habilidades y aptitudes laborales que podrías incluir en tu currículum.
¿Qué son habilidades?
La habilidad significa la destreza adquirida por medio del aprendizaje y la práctica para llevar a cabo una tarea de manera eficiente. Por ejemplo, un individuo puede desarrollar habilidades técnicas específicas como la programación, la redacción o la gestión de proyectos.
Los ejemplos de habilidades son muy variados e incluyen tanto habilidades duras como habilidades blandas o soft skills. Las habilidades duras hacen referencia a los conocimientos relacionados con el trabajo y que una persona necesita para llevar a cabo funciones técnicas.
Mientras que las habilidades blandas, son competencias interpersonales que facilitan la interacción efectiva y armoniosa con otras personas, como la comunicación, el trabajo en equipo, la empatía, el liderazgo y la capacidad para resolver problemas.
¿Qué son las aptitudes?
A diferencia de las habilidades, que son aprendidas, las aptitudes son capacidades innatas o naturales que un individuo posee para realizar determinadas tareas de manera efectiva. Algunos ejemplos de aptitudes pueden ser el razonamiento lógico, la capacidad creativa, la habilidad matemática o la capacidad para el aprendizaje rápido. En general, las aptitudes se refieren a la facilidad de una persona para aprender y desarrollar habilidades en un área específica.
Habilidad o Aptitud: ¿Cuáles suman más al CV?
Al elaborar un CV, tanto las habilidades como las aptitudes son de gran importancia. Sin embargo, cada una aporta valor de manera diferente. Las habilidades, al ser evidencia de tu experiencia y formación, validan tu competencia en áreas específicas. Por otro lado, las aptitudes, al mostrar tu potencial natural para sobresalir en ciertas áreas, pueden abrirte la puerta a oportunidades en las que puedas desarrollar y perfeccionar habilidades.
Te puede interesar: Evita estos errores al hacer un CV
Aptitudes para CV
En un currículum, la lista de aptitudes puede variar dependiendo del tipo de trabajo al que te postules. Por ejemplo, para un trabajo de ventas, podrías mencionar una aptitud natural para la persuasión. Para un puesto de ingeniería, podrías destacar tu aptitud para el pensamiento analítico y la resolución de problemas.
¿Qué habilidades agregar a mi CV?
Incluir las habilidades correctas en tu currículum vitae (CV) puede marcar la diferencia en el proceso de selección. Por eso, es importante que conozcas cuáles son esas habilidades que te hacen destacar. Aquí, te ofrecemos una lista de habilidades que podrías considerar para tu CV.
Habilidades duras o técnicas
Algunos ejemplos pueden incluir:
- Habilidades informáticas: Conocimiento de software específico, programación, diseño gráfico, administración de redes.
- Gestión de proyectos: Planificación, coordinación de equipos, gestión del tiempo.
- Habilidades financieras: Análisis de costos, presupuesto, contabilidad.
Habilidades blandas o soft skills
Algunas de las habilidades blandas más valoradas incluyen:
- Comunicación: Capacidad para expresarse claramente, tanto de forma escrita como oral, y capacidad para escuchar activamente.
- Trabajo en equipo: Capacidad para trabajar de forma efectiva con otros, colaborar y cooperar para alcanzar metas comunes.
- Liderazgo: Capacidad para dirigir, inspirar y motivar a otros.
- Resolución de problemas: Capacidad para identificar problemas, analizar posibles soluciones y tomar decisiones acertadas.
- Flexibilidad y adaptabilidad: Capacidad para adaptarse a diferentes situaciones y cambiar de rumbo cuando es necesario.
- Gestión del tiempo: Habilidad para priorizar tareas, trabajar de forma eficiente y cumplir plazos.
Recuerda que las habilidades que incluyas en tu CV deben estar en sintonía con el puesto al que te estás postulando. Investiga las habilidades que la empresa valora y piensa en cómo puedes demostrar que las posees. Y no olvides que la manera en la que comunicas estas habilidades puede ser tan importante como las habilidades mismas.
Finalmente, es importante recordar que las aptitudes y habilidades laborales no son estáticas y pueden desarrollarse con el tiempo. Incluso las aptitudes, aunque sean innatas, pueden mejorarse a través de la práctica y la experiencia.
Así que, aunque el balance entre habilidades y aptitudes en tu CV dependa del trabajo específico y de tu perfil individual, siempre es buena idea demostrar una combinación de ambas, y la disposición para continuar aprendiendo y mejorándote.
