Vida universitaria
¿No te que quedaste en ninguna universidad pública? ¡No te preocupes! No es el fin del mundo. Te compartimos algunos pasos que puedes seguir si no fuiste admitido.
Acceder a una formación universitaria en una institución pública en México no es un camino fácil. De hecho, más de la mitad de los aspirantes que realizan los exámenes de admisión a la UNAM o al IPN se quedan fuera de dichas universidades. Más allá de un tema de puntaje, se trata de lugares disponibles.
La realidad es que ambos centros educativos no se dan abasto para recibir a todos aquellos estudiantes que se animan a tocar la puerta. Si eres de los estudiantes que no son admitidos por una universidad, esta situación podría sumergirte en una sensación de incertidumbre y estrés al no tener un espacio asegurado para continuar tus estudios.
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Si tú como muchos se pregunta ¿qué hacer si no entro a la universidad? Debes saber que existen alternativas para conseguir tu objetivo de llegar a un grado universitario. ¡Sé precavido y asegura tu futuro profesional!
¿Por qué es importante tener un plan b?
Cuando tenemos un objetivo en mente, solemos diseñar un plan para llegar a él. Por ejemplo: si deseamos bajar de peso, acudimos a un nutriólogo para que nos diseñe una dieta especial, hacemos ejercicio y monitoreamos nuestro progreso.
Sin embargo, las cosas no siempre salen conforme a lo planeado. Es importante que ideemos un plan alternativo para que, si el primero no funciona, no nos distraigamos de nuestro objetivo y podamos alcanzarlo tal cual nos lo hemos establecido. ¡Tener un plan b es asegurarte de que llegarás a tu destino!
Tener un plan alternativo en caso de que no te quedes en la universidad te permitirá:
Ganar confianza en ti mismo
¿Has visto a los equilibristas en la cuerda floja en el circo? ¿Has visto que usan una red de seguridad debajo de ellos? Tal como en este ejemplo, tener una alternativa te ayudará a sentirte mucho más seguro, ya que tienes una red de apoyo en la que puedes caer por si los resultados no son los esperados.
Mantener una actitud positiva
Al armar un plan b te habrás preparado mentalmente para un escenario desfavorecedor, ayudándote a quitarte los sentimientos negativos que puedas desarrollar si las cosas no ocurren como las deseabas.
Contribuir con tus buenos hábitos
Al armar un plan b estarás trabajando en pro de una actitud más previsora y responsable, dándote la posibilidad de actuar ante una adversidad en una forma más madura y centrada.
Tener un segundo plan no significa que desconfíes en ti, sino que eres una persona enfocada en su objetivo y haría lo necesario por llegar a la meta. Si deseas mantener una actitud más previsora y crees que armar un plan b te será de ayuda en caso de no quedarte en la universidad a la que aplicaste, te damos algunos tips útiles para armar dicha estrategia. ¡Ánimo!
3 cosas que puedes hacer si no te quedaste en la universidad
1. SIEMPRE ten en mente cuál es tu objetivo
Más allá de la institución donde estudies, piensa a largo plazo: lo que deseas hacer, cómo te ves en un futuro, etc.
2. Investiga sobre tus opciones
Ármate de información. Consulta páginas de universidades, compara planes de estudio, solicita datos de becas, financiamientos universitarios y apoyos para poder seguir estudiando.
3. Piensa en las alternativas
Si las opciones que encuentras se ven opacadas por el factor económico, piensa en complementar tus estudios con un trabajo de medio tiempo que te ayude a costear los gastos. Incluso puedes encontrar universidades que ofrecen beneficios para los estudiantes que combinan ambas tareas.
Estudiar la universidad te abrirá muchas puertas en el futuro. No permitas que un evento obstaculice el desarrollo de tu potencial. Conoce más sobre lo que tenemos en UNITEC para ti y tu desarrollo profesional.
